Algunos de los alumnos fueron a las 13:30 para preparar y echar la lumbre mientras otros compraban la bebida y Marina se encargó de la carne. Vicente llegó a las 14:30 y se encargó de asar la carne con Javier.
Después de comer, se organzaron unas partidas del juego popular del "escondite" pero con una pequeña modificación, ya que era por parejas.
Al final, después de recoger todo, cada uno se fue a su casa, guardando las sobras para la caldereta del día siguiente.